Criptonomicón

Este fin de semana he terminado el tercer tomo del ya famoso Criptonomicón. Me ha gustado mucho, lo he pasado muy bien leyéndolo. No voy a escribir aquí una crítica del libro habiendo algunas tan buenas como la de El Archivo de Nessus o la de Cyberdark.net (esta última con muchos comentarios positivos y negativos de los lectores del libro.) Como nota curiosa decir que me sorprendió mucho cuando leí la página de información bibliográfica y descubrí que estaba traducido por Pedro Jorge Romero, weblogger al que leo a diario.

Si diré no obstante que el final del libro no me ha gustado, advirtiendo al desprevenido lector que lo que viene a continuación es un spoiler en toda regla.

Efectivamente, después de un genial desarrollo con Randy resolviendo el código Aretusa en la cárcel, las últimas 50 páginas son decepcionantes. Esa lucha en la selva con el abogado-loco Andrew Loew parece sacada del un best-seller. Además no se desarrolla la Sociedad Eroditorium ni la idea del Manual para Prevenir Holocaustos, dando la sensación de que falta un cuarto volumen (de hecho, el autor parece que ha anunciado ya la continuación del Criptonomicón). Aparte de estas últimas 50 páginas, el libro resulta divertido y muy entretenido sobre todo (en mi opinión) en las partes ambientadas en la segunda guerra mundial.